BAJANDO A GUAYAQUIL

Matilda comenzó a subir lentamente la larga cuesta que me llavaria a los pies del Chimborazo, el volcán más alto de Ecuador, recorrí extasiado la hermosisima Via Flores que esta en medio de un cañón. El viento helado comenzó a sentirse y la motoneta andaba cada vez mas despacio por el poco oxigeno, pero una vez superada la cuesta apareció el cartel que indicaba que Guaranda era el poblado mas cercano y comencé a ganar velocidad. 

Poco a poco el clima y el  paisaje fueron cambiando, dejar  la sierra y buscar el llano hacia la costa ecuatoriana. Mucho antes de comenzar a descender hacia Babahoyo pase por un zona en donde la neblina trepaba desde las laderas de estas montañas y quizá fue este el ultimo tramo de frío que percibí. 

Asi que de repente fui sintiendo que la vespa ganaba y ganaba mas potencia y velocidad, pero mantuve los 60 kms por hora, ademas por el piston nuevo que llevo no debo forzar la motoneta. 

Ya me habian hablado en Ambato del paisaje que uno se encuentra en algún punto de esta ruta y di por hecho que lo habia encontrado, pues apareció ante mi vista un grupo de palmeras enormes que me hicieron recordar las del Cocora en Colombia, asi que estacione a matti y tome estas fotos que dejo aqui como testimonio de este descenso rumbo al puerto de Guayaquil a donde llegué después de las 15:30; solo sentí que  estaba realmente aquí cuando atravesé el puente de Samborondon en medio de un sol intenso que me confirmaba que había llegado a la ciudad de los esteros, la capital del Guayas.